Así arrancan las encuestas en Cataluña
El adelanto electoral en Cataluña ha cogido por sorpresa a los encuestadores: desde el otoño apenas se han publicado sondeos. Pero, ¿qué información tenemos? A continuación analizamos lo que dicen las encuestas disponibles y especulamos sobre cómo podrían estar moviéndose los votantes.
La mejor información actual es la del Centro de Estudios de Opinión (CEO), que está haciendo un trabajo ejemplar, por su transparencia y su rigor metodológico. Su última estimación la publicó en noviembre: entonces colocó al PSC como primera fuerza, con alrededor de 42 escaños, seguido de ERC (32), Junts (21), PP (14), los Comunes (12), Vox (7) y las CUP (6).
Si no cambian mucho los sondeos, aquella estimación dejaba pocas mayorías sencillas, política y aritméticamente. Podría darse un acuerdo entre el PSC y ERC, que sumaban unos 74 asientos según el sondeo, bastante por encima de los 68 necesarios. La principal alternativa sería una mayoría soberanista, con ERC, Junts y CUP, aunque en noviembre el CEO los veía justos de fuerzas: rondaban los 59 escaños entre los tres. El resto de opciones se ven, de momento, más complicadas, aunque sería miope descartarlas.
Este último barómetro del CEO capturó un buen momento para los socialistas, que venían de ganar en Cataluña en las generales del 23-J.

El CEO hizo sus entrevistas en octubre, antes de la investidura, coincidiendo con la negociación de los socialistas con ERC y Junts. Es decir, sin Pedro Sánchez reelegido, antes de que la amnistía se acordase, antes de los primeros desencuentros entre estos partidos y, sobre todo, antes del estallido del caso Koldo.
Es inevitable preguntarse cómo pueden haberse movido los votantes en estos meses. La respuesta la tendremos conforme se vayan publicando sondeos en las próximas semanas. Ahora tenemos algunas pista. La primera es la evolución del voto en las encuestas a nivel nacional, que son más abundantes. Según 40dB., desde septiembre, el PSOE ha retrocedido 1,6 puntos.

El retroceso de los socialistas no parece profundo, pero sí firme. Lo observan la mayoría de sondeos. Por ejemplo, según el último CIS —publicado hace pocos días—, el PSOE ha caído unos tres puntos en intención directa de voto con respecto a sus números de septiembre. Y lo que es aún más relevante: ese retroceso se observa también cuando miramos solo las entrevistas en Cataluña. Allí el retroceso de los socialistas desde septiembre es quizás más suave, pero también patente: el PSC caía uno o dos puntos en febrero, a la espera del dato de marzo.
Por supuesto, la convocatoria electoral por sorpresa multiplica las incógnitas. Hay que confirmar los candidatos de cada partido, medir mejor el voto en Cataluña, y observar luego si la propia convocatoria provoca algún movimiento del electorado. Estas dudas se irán resolviendo con la mejor herramienta de predicción electoral que tenemos: los sondeos que pronto irán publicándose.