Morata desafía al Atlético de Madrid: «No puedo quedarme para no jugar»>
Esta situación ha precipitado que se abra el debate en torno a quién debería ser el 9 del Atleti. Alguna de esas sirenas que han sonado anuncian un posible acuerdo con Dovbyk y la entidad rojiblanca, delantero del Girona que ha conseguido el pichichi con 24 goles. En una entrevista con la Cadena SER, el capitán d la selección española no se ha mordido la lengua y opina sobre sobre el bombardeo informativo del que él también se ha hecho eco: «Me imagino que lo que sale en prensa que es lo que han hablado ellos [los dirigentes del club]. Yo no he hablado con nadie. Si leo que el Atleti quiere fichar a ocho delanteros me imagino que es porque no soy la prioridad del club», expresó el capitán de la Selección. «Tengo 31 años, en octubre hago los 32, no me puedo quedar en el Atleti para no jugar», añadió.
El jugador, en la misma entrevista, ha manifestado su intención de permanecer en el club del Manzanares, pero es consciente de que no es una decisión que dependa de él exclusivamente: «Yo soy muy feliz en el Atlético de Madrid y quiero ganar un título con el ellos. Pero yo no sé si la prioridad es mantenerme a mí o fichar otros delanteros», dudaba.
Morata, que ha pasado por muchos clubes (Real Madrid, Juventus, Chelsea y Atlético de Madrid), también hizo balance de su temporada, en la que defendió su actitud y su compromiso: «Al final este año podría haber sido diferente a nivel personal. He tenido varias lesiones, problemas... pero creo que no he hecho la temporada que muchas personas dentro del club o aficionados se piensan».
Un malestar general
El delantero del Atlético de Madrid aseguró que hasta sus niños son conscientes del malestar general que hay entorno al jugador madrileño: «Mis hijos no entienden porque hay mucha gente que tienen mucha rabia hacia su padre». Pero ahora su mirada está puesta en liderar a la selección española a por la cuarta Eurocopa, y su futuro se resolverá con el Cholo Simeone cuando ambos vuelvan de sus respectivos compromisos veraniegos.