Junqueras se aferra a la dirección de ERC sin aclarar a quién apoyará en la investidura

El presidente de Esquerra Republicana, Oriol Junqueras, ha publicado este martes una carta abierta a la ciudadanía en la que, además de aferrarse a la dirección del partido, bendice que los republicanos, que perdieron 13 escaños en las elecciones del domingo en Cataluña, se vayan a la oposición. Tras fracasar en revalidar el Govern, cree Junqueras que lo que ahora toca es fiscalizar de manera constructiva la acción de un Ejecutivo aún incierto. El exvicepresident ha mantenido las distancias respecto a PSC y Junts, que le han pedido que les apoye en su búsqueda de la investidura.

“Me veo capaz y con fuerza para seguir trabajando por nuestro país y hacerlo, como siempre, desde el lugar que determine la militancia”, ha escrito Junqueras en una larga misiva que el partido ha publicado en su página web. El presidente de la formación rompe así su silencio después de los malos resultados del 12-M y de que ayer el president en funciones, Pere Aragonès, asumiera la factura de la debacle dejando la primera línea de la política

Junqueras ha bendecido la idea de pasar a la oposición que desde hace algunos días comentaban líderes de ERC y que el propio domingo adelantó Aragonès. “No queremos cortinas de humo [fer volar coloms] que nos paralicen y generen más desgate y frustración”, ha dicho el exvicepresident, señalando a Puigdemont y su partido, Junts. “No pasaremos -ha agregado- por los que piensan que Cataluña puede ser gobernada desde Madrid”, ha añadido Junqueras, en un mensaje claro al PSC.

Tanto Salvador Illa, la fuerza más votada el domingo, como Carles Puigdemont, que quedó en segundo lugar, apelaron el pasado lunes a Aragonès para que le apoyen en sus sendos intentos de presentarse a la investidura. El PSC, además de los republicanos, necesitaría a los comunes para sumar la mayoría absoluta y lograr así que Illa fuera elegido en primera votación. Para la segunda, no bastaría con que los de Junqueras se abstengan y se necesitaría, por ejemplo al PP. Puigdemont, por su parte, aspira a que la CUP y ERC le apoyen en la primera ronda de votación o que el PSC, en la segunda, se abstenga pese a haber ganado las elecciones, cosa que Salvador Illa ya ha descartado.

Junqueras ha querido acompañar su claro mensaje de continuidad en la dirección del partido con un guiño a los votantes perdidos el domingo (más de 178.000 con respecto a las elecciones de 2021) y se ha abierto a un debate interno sobre el futuro del partido. “Entendemos y encaramos la reflexión que exige el aviso que nos ha hecho la ciudadanía. Pondremos sus votos de forma constructiva al servicios del país”, ha dicho.

Finalmente, se ha referido a la decisión de Aragonès. “Es una pérdida para el país y para ERC, pero sabemos que seguirá trabajando para Cataluña a través de nuestro partido. Porque todos nosotros sabemos que podemos ser el primero y el último. Y porque todos nosotros queremos ponernos al servicio del país a través de ERC”, ha apostillado.

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