Tesla decepciona: gana un 45% menos, se desploma en Bolsa y arrastra a tecnológicas como Google, Nvidia y Microsoft

Tesla ha venido a rematar un mal mes para la tecnología estadounidense que está haciendo tomar aire y calmar los ánimos de los inversores ante una posible corrección a la vuelta de la esquina. El fabricante de vehículos eléctricos ha publicado este miércoles unos resultados pobres, con una caída del beneficio neto del 45% y una reducción de los ingresos del 7%, hasta los 18.314 millones de euros (19.900 millones de dólares).

La empresa capitaneada por Elon Musk registró ganancias de 1.360 millones de euros frente a los 2.488 millones que obtuvo durante el mismo periodo el año pasado. Asimismo, el ebitda de la empresa cayó un 21% en comparación a dicho periodo de 2023, alcanzando los 3.382 millones de euros entre abril y julio.

El pasado mes de abril Tesla sorprendió al mercado al recortar los precios de sus vehículos a nivel mundial y ofrecer descuentos e incentivos para las ventas en plena desaceleración de los ingresos y ante una creciente competencia, especialmente en China, uno de sus mercados clave. Esto explica, parcialmente, la caída también de sus márgenes de beneficio que son los más reducidos en cinco años.

La preocupación por el futuro de Tesla se ha extendido al mercado donde sus acciones se desploman más del 10% -aunque la caída ha llegado a superar el 12%- y arrastra consigo al resto de Los siete magníficos estadounidenses, que están provocando pérdidas en el índice tecnológico Nasdaq 100 cercanas al 3%. Compañías como el gigante de los semiconductores Nvidia está sufriendo pérdidas superiores al 5% en el mercado, similares a Alphabet, matriz de Google. Microsoft y Apple, las otras dos compañías de los 3 billones de dólares (junto a Nvidia), también ceden un 3% en la sesión, mientras que Meta (antigua Facebook) pierde otro 4%, extendiendo una jornada negra al resto del parqué neoyorquino.

Además, el fabricante de vehículos ha dado otras dos malas noticias al mercado: el retraso de la presentación en sociedad de los conocidos como robotaxis, o coches de conducción autónoma, y la paralización temporal de su planta de México a la espera de conocer el resultado en las elecciones estadounidenses del próximo mes de noviembre. Musk ha reconocido que la decisión definitiva se adoptará tras saber si, en caso de una victoria republicana en la que Donald Trump resulte presidente, se aplicarán finalmente aranceles para los productos fabricados en México.

En lo que respecta a la tecnología de conducción autónoma, el lanzamiento se retrasa de agosto a octubre. Pasará a crear una nueva división de negocio de Tesla y, según Musk, sería capaz de multiplicar por seis veces la capitalización de mercado actual, en los 0,69 billones de dólares. Los analistas se muestran escépticos y consideran incluso que 2025 podría ser precipitado para que el nuevo segmento de Tesla de conducción autónoma vea la luz.

Musk no está preocupado

Este mismo miércoles, Elon Musk ha publicado una encuesta en la red social X, que es de su propiedad, preguntando a los usuarios si el fabricante de vehículos debería invertir 5.000 millones de dólares (4.602 millones de euros) en la startup de inteligencia artificial también suya, xAI. "Se necesita la aprobación de la junta y el voto de los accionistas, así que esto es solo para probar las aguas", ha comentado el magnate.

Por el momento, la mayor parte de los usuarios que han votado, más del 62% de un total que supera los 753.800 internautas se ha pronunciado a favor de que se efectúe esta posible operación.