'Las abogadas' regresan a los crímenes de Atocha en TVE
La serie pone el pistoletazo de salida en los años 70, un momento en el que las cuatro jóvenes se conocen en la facultad de Derecho y, llenas de ilusión, deciden velar por la justicia y, como algunas, emprender su propio despacho. Interpretar a estas mujeres no es fácil. «Al principio sentíamos mucha responsabilidad pero nos dimos cuenta de que lo mejor era quitarnos el peso de esos apellidos, que en realidad eran cuatro jóvenes que estaban empezando en la universidad e íbamos a seguir sus vidas y sus experiencias», aseguró Irene Escolar. Cuando recibió la propuesta de 'Las Abogadas', decidió reunirse con Manuela Carmena, a quien interpreta en la serie, no tanto para recordar su experiencia pasada sino intentar absorber algunos gestos que tiene. «Es un rol muy difícil de interpretar, no quería imitarla, pero sí tener algún guiño con su esencia», asegura.
El hecho de que tres de las cuatro protagonistas reales de la historia sigan con vida ha sido un aliciente para las actrices. Almudena Pascual, que interpreta a Paquita Sauquillo, pudo encontrarse con ella y hablar sobre su vida. «Cuando le preguntas acerca de su juventud, ella misma asegura que no se reconoce ahora mismo en algunas de las cosas que hizo, pero sí en los valores que sigue defendiendo», añade.
Aunque la serie está basada en hechos reales, RTVE asegura que hay ficción en la serie y, si bien es cierto que el contexto es real y algunos hechos sucedieron, no han querido seguir tanto la historia de estas mujeres, con luces y sombras, sino más bien mostrar la vida de cuatro abogadas, jóvenes, y con ganas de comerse el mundo, en una sociedad que estaba cambiando por completo. «Consideramos que este proyecto es un servicio público, una serie creada y protagonizada por mujeres y que además es feminista», indicó Marta Sánchez, guionista de la serie.
No es fácil ponerse en la piel de mujeres tan mediáticas como Manuela Carmena o Cristina Almeida, tan presentes en la televisión y en la vida pública durante mucho tiempo, pero tampoco es sencillo hacerlo cuando apenas hay archivos fotográficos o documentos sobre Lola González o Paca Sauquillo en su juventud. «Era un reto porque no sabíamos ni cómo vestían, ni cómo afrontaban todo lo que les iba sucediendo y apenas había publicaciones en los periódicos o archivos a los que poder acudir. Teníamos que construir el personaje, en parte, nosotras mismas con el guion y las referencias únicamente del entorno», aseguró Almudena Pascual.
Es la primera gran producción para esta actriz, mientras que Irene Escolar es ya una veterana en la profesión. «Ha sido precioso trabajar juntas, no ha habido competitividad ni estas cosas que a veces se piensa sobre la envidia o el pique entre mujeres», aseguró Elisabet Casanova.