Buenas son tortas

Los 48 millones de usuarios de Tussam en lo que llevamos de año es un éxito de gestión de la empresa, que ha sabido cubrir las enormes lagunas que tiene Sevilla con la movilidad compartida. La ampliación del tranvía ha sido un factor clave, al igual que el descuento en el abono. Seguirá creciendo cuando se ponga en marcha el tranvibús. Pero, en realidad, el récord tiene una interpretación agridulce. Tras esas cifras históricas se esconde el hecho de que, en una ciudad de casi 700.000 habitantes y con un caos de tráfico permanente, hay una demanda inmensa de transporte público. A todos los sevillanos nos encantaría encontrarnos con una caída inmensa de viajeros de Tussam ante la puesta en marcha de la red completa de metro. Pero a falta de pan, buenas son tortas.