La Cumbre de Paz de Suiza evita ataques a Rusia pero defiende la integridad territorial de Ucrania y censura el uso de la seguridad nuclear y alimentaria como arma
El domingo amaneció soleado en Bürgenstock. Los rebaños de vacas pastan con tranquilidad en los prados, mientras furgonetas y autobuses paran en los distintos controles policiales. La Cumbre de Paz de Suiza sobre Ucrania afronta su jornada final de trabajo, en la que se ha alcanzado un acuerdo para un documento que refleje los temas debatidos en estas 48 horas. Un texto, cuyo último borrador de tres páginas en el que han trabajado los líderes y al que ha tenido acceso E MUNDO, en el que se evitan ataques a Rusia, de hecho no se menciona a este país, para evitar un desaire que impida la participación de los de Putin en un futuro proceso, y que reivindica "los principios de soberanía, independencia y la integridad territorial de todos los Estados, incluida Ucrania, dentro de sus fronteras internacionalmente reconocidas, incluidas las aguas territoriales, y la resolución de controversias por medios pacíficos como principios de derecho internacional".
El borrador es un texto en el que se respalda a Ucrania, se avala en cierta medida las reivindicaciones de Volodímir Zelenski, pero con una redacción muy cuidada y medida. Ejercicio de diplomacia. La declaración que han trabajado los líderes hasta última hora consta de tres puntos, en los que plasman que ni la seguridad nuclear ni la seguridad alimentaria pueden convertirse en un arma de guerra. "Cualquier amenaza o uso de armas nucleares en el contexto de la guerra en curso contra Ucrania es inadmisible", recoge el primer punto acordado. "La seguridad alimentaria no debe convertirse en un arma de ningún tipo".
El tercer y último punto pide que los prisioneros de guerra sean "liberados por completo. Todos los niños ucranianos deportados y desplazados ilegalmente, y todos los demás civiles ucranianos que fueron ilegalmente detenidos, deben ser devueltos a Ucrania". La palabra Rusia sólo aparece mencionada en una ocasión, en la primera frase del texto, pero para describir lo que se ha abordado en esta cumbre: "La guerra en curso de la Federación Rusa contra Ucrania sigue causando sufrimiento humano y destrucción a gran escala, y creando riesgos y crisis con repercusiones globales para el mundo".
Porque el objetivo de esta cita era sentar las bases para un futuro proyecto de paz, una negociación, pero el centenar de delegaciones que se han dado cita eran conscientes de que esto sólo se puede hacer incorporando en un futuro a Rusia. De ahí que la mayoría de los líderes hayan hecho hincapié en este asunto y los debates abordados hayan sido sobre asuntos que generaban consenso y evitaban fricciones grandes con Rusia. De hecho, la declaración final hace un llamamiento a que todas las partes deben implicarse en la paz. "Creemos que el logro de la paz requiere la participación de todas las partes y el diálogo entre ellas. Por lo tanto, hemos decidido emprender medidas concretas en el futuro en los ámbitos mencionados, con un mayor compromiso de los representantes de todas las partes".