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Van de Velde regresaba al voleibol en 2017, cuando era puesto en libertad y desde entonces ha seguido jugando, siendo convocado para la cita olímpica del próximo mes por la Federación Neerlandesa, que ha través de un comunicado ha aclarado que era conocer del pasado del deportista. En este sentido, ha añadido que hablaron con el Comité Olímpico Neerlandés, la Federación Internacional de Voleibol y el propio Van de Velde antes de su regreso al deporte.
Según el Comité Olímpico Neerlandés, el jugador cumple todas las condiciones para que un deportista pueda volver a competir tras una condena. El COI, por su parte, ha explicado que las nominaciones de deportistas son una competencia exclusiva de los comités olímpicos nacionales.
«Fue condenado de acuerdo a la ley inglesa y ha cumplido su condena. Hemos estado en contacto permanente con Steven, que se ha reintegrado completamente en la comunidad holandesa de voleibol. Está demostrando ser un profesional y ser humano ejemplar y no ha habido ninguna razón para dudar de él desde su regreso», ha justificado la Federación neerlandesa a través de su comunicado.
Van de Velde, en ese comunicado de su federación, asegura que sabía que «este episodio negro» de su vida resurgiría algún día. «Entiendo que en el mayor evento deportivo en el mundo, esto puede atraer la atención de los medios internacionales. Mis padres, amigos, conocidos y colegas me aceptaron de nuevo después del mayor error de mi joven vida. La federación me ofreció un futuro con condiciones y acuerdos claros. Pero también pienso en el adolescente que era, inseguro, no listo para una vida como atleta de primer nivel y infeliz por dentro, porque no sabía quién era y lo que quería».