El Betis desata su ambición hacia la Champions (2-3)

Porque el día se puso en chino y supo traducirlo a su idioma de fútbol, a su capacidad de darle la vuelta a todo, a su ola positiva con coro de miles de béticos en las gradas para festejar lo que estaba haciendo su equipo en este mediodía feliz en el sur de Madrid. Porque la ilusión está vestida de verde con un equipo que es capaz de tanto, que se cree que puede, que sabe que lo hará y que tiene argumentos para tumbar a cualquiera que se le ponga por delante.

En el arranque, como pasó en Valladolid, el Betis era mejor en todo menos en el marcador. Al descanso se llegó con 2-0 en dos ocasiones aisladas del Leganés mientras la pelota, las llegadas y la sensación de peligro estaba más en las botas de Antony e Isco que en los blanquiazules. Pero no salía nada en ese tramo. Y eso que empezó con una cabalgada de Abde aprovechando un error de Rosier que el marroquí no aprovechó y con una presión altísima de los heliopolitanos para reiniciar jugada una y otra vez buscando poner en apuros a Dmitrovic. Antony e Isco se gustan y se buscan y hacen que el Betis tenga una sensación positiva dejando sin aliento a su rival. De tal forma que Isco llega al área con un pase medido de Antony pero no dispara sino se la quiere dejar a Cucho pero su servicio-control no es bueno.

Los de Pellegrini cocinan las jugadas abriéndose mucho y tomando riesgos, algo que se desvela finalmente como una temeridad cuando Abde pasa atrás y Natan va demasiado confiado ante Raba, perdiendo el balón. La acción se convierte en una cabalgada con Llorente como último hombre. Está condicionado el madrileño por estar apercibido y se nota. Cuerpea y parece que se lleva la pelota pero Raba se revuelve en el suelo, la rebaña y dispara solo ante Adrián, que puede hacer más. El 1-0 le da al partido un escenario inesperado.

Reacciona Antony con un buen balón a Isco en el segundo palo pero el remate de éste se va alto. El Leganés está cómodo atrás taponando los disparos de Cucho y Abde y viendo cómo Antony se busca los espacios para generar peligro pero no consigue el gol ni inquietar de verdad. Y en esa situación es cuando Raba hace el segundo después de otro contragolpe y aprovecha el servicio de Juan Cruz, con Llorente descolgado rompiendo el fuera de juego y Adrián estático sin mandar en su área pequeña. Un 2-0 que es un resultado muy duro para lo visto y que obligará al Betis a dar otra cara más agresiva para desmostrar que ha venido a Leganés a por la quinta plaza y no a caer en un supuesto llano.

Demuestra el Betis que está en el partido nada más salir de vestuarios con una acción de Fornals llegando desde atrás después de un pase de Antony. Eso levanta a su gente, que canta por el balompié. Cissé persigue a Isco por todo el campo y eso lo nota el juego verdiblanco, falto de mayor frescura y colmillo. Raba se lesiona justo tras otra jugada en la que volvió locos a Natan y a Llorente. Pellegrini quiere modificar el curso del partido y hace un triple cambio: Sabaly por Aitor, Bakambu por Fornals y Jesús por Abde. El efecto es inmediato pues el primer balón que toca el delantero congoleño vien de un mal control de Dmitrovic, que le hace penalti en el área pequeña. Isco lo transforma en gol y el 2-1 pinta un nuevo escenario repleto de ilusión.

El partido debe ser otro pero a los verdiblncos les cuesta domesticar lo que viene entre interrupciones y falta de continuidad. Gol anulado a los locales por fuera de juego de Sergio y ocasión clara de Jesús Rodríguez que, tras un recorte, dispara con la izquierda muy centrado. Llorente sigue sin ofrecer sensaciones de seguridad y sale Bartra en su lugar. Soto Grado le perdona la expulsión a Rosier por una entrada sobre Natan a la desesperada que era la segunda amarilla.

Y el 2-2 llega en una acción inesperada y directa. Bartra le pega con tremenda dureza desde 40 metros. Un trallazo impresionante que obliga a Dmitrovic a estirarse pero sin atrapar el balón, que cae suelto y ahí está Bakambu para rematar de cabeza a puerta vacía el empate. Queda un cuarto de hora y el partido está ya, ahora sí, para el Betis. Y eso que el desgaste verdiblanco del jueves podía pasar factura pero los cambios le dieron otro aire al equipo y ahora es cuando debe demostrar que es superior para remontar y ganar.

Y llega la contra de Bakambu, que prolonga para Antony, el centro de éste lo acomoda Isco y cae a Cucho para que dispare una volea espectacular que hace el 2-3. Una remontada espectcular, sobresaliente, mayúscula. Para hacer historia, para saber que este Betis quiere Champions. Luego volvió Carvalho unos minutos para mantener el juego, Adrián dio el susto con una salida tardía ante Miguel y los béticos celebraron cada carrera de Bakambu y Jesús para sostener el 2-3 y con ovación a Isco para ese triunfo tan espectacular que manda a la Champions como su objetivo este año.