Queda su obra inmortal
En 2022 el Gobierno impuso que la fabricación de los 348 vehículos Dragón para el Ejército se efectuara en la factoría de Trubia (Asturias) en lugar de en la de Alcalá de Guadaira (Sevilla), ambas pertenecientes a Gdsbs. La finalidad fue favorecer una comunidad con gobierno socialista en detrimento de una del PP, puesto que en la sevillana ya se disponía de instalaciones, personal capacitado y experiencia, al haberse fabricado en ella los BMR y los Pizarros. Ahora el Ejército prevé reemplazar sus carros Leopard 2A4 por el Leopard 2A8 y actualizar los Leopardos 2E a idéntico modelo, por lo que es lógico que el trabajo recaiga en Gdsbs (Alcalá de Guadaira) donde ya se fabricaron los 219 Leopardos 2E. Pero parece que nuevamente el Gobierno pretende hacer la misma jugarreta anterior, para lo que se sirve de su influencia en la tecnológica Indra, que tras fracasar en su intento de compra de Gdsbs intenta hacerse con la asturiana Duro Felguera y la vasca SAPA, y después de que el Ejecutivo le adjudique el contrato, llevarse la producción y el trabajo al norte y dejar a Andalucía, otra vez, a dos velas. Aquí quiero ver desmelenarse a la andaluza y candidata a la Junta María Jesús Montero. Sería para aplaudirle con la misma efusión con que ella lo hace.