Resultados prometedores de una vacuna de ARNm en cuatro pacientes con cáncer cerebral
Un ensayo clínico en fase 1 prueba por primera vez en cuatro pacientes adultos una vacuna basada en ARN mensajero contra el tipo de cáncer cerebral más agresivo y letal, el glioblastoma. Esta inmunoterapia, desarrollada por el equipo del bioquímico español Héctor Méndez en la Universidad de Florida (UF), en Gainesville, reprograma mediante el ARNm las defensas del organismo para que ataquen al cáncer.
El glioblastoma es uno de los diagnósticos más devastadores, con una supervivencia media de unos 15 meses. El tratamiento estándar actual consiste en cirugía, radioterapia y alguna combinación de quimioterapia.
Los resultados de este estudio preliminar, que publica hoy miércoles la revista Cell, avalan la viabilidad de esta vacuna experimental. Aunque es demasiado pronto para evaluar los efectos clínicos de la vacuna, los pacientes vivieron libres de la enfermedad más tiempo del esperado y sobrevivieron más tiempo del previsto. En concreto, los pacientes tuvieron una supervivencia hasta un 50% superior a la esperada.
Elias Sayour, oncólogo pediátrico de UF e investigador principal de este trabajo, destaca en un comunicado que uno de los hallazgos más impresionantes fue la rapidez con la que al administrar el tratamiento por vía intravenosa, el sistema inmunitario respondió para rechazar el tumor en los pacientes.
La respuesta inmunitaria se observó en menos de dos días desde la administración de la vacuna, una rapidez "muy sorprendente", apunta Sayour, algo que es "fundamental para desbloquear los efectos posteriores de la respuesta inmunitaria".
El ensayo es la culminación de unos experimentos previos, desarrollados a lo largo de siete años, en los que la vacuna se probó en modelos preclínicos de ratón, primero, y más tarde en otro estudio con perros que habían desarrollado espontáneamente cáncer cerebral terminal y no tenían otras opciones de tratamiento.
El experimento se realizó en 10 canes, con el consentimiento de sus dueños y en colaboración con la Facultad de Veterinaria de la UF. Los perros ofrecen un modelo natural de glioma maligno porque constituyen la única especie que desarrolla tumores cerebrales espontáneos con cierta frecuencia, explica Sheila Carrera-Justiz, neuróloga veterinaria de citada facultad, quien colabora con Sayour en esta línea de investigación.
Los 10 perros del experimento vivieron una media de 139 días, frente a la supervivencia media de 30 a 60 días típica de estos animales con la enfermedad.
Una vez probadas las vacunas de ARNm personalizadas con los perros, el equipo de Sayour avanzó a este pequeño estudio, cuyos resultados hacen públicos hoy, con el objetivo principal de comprobar la seguridad y viabilidad del tratamiento antes de llevarlo a un ensayo de mayor envergadura.
Sayour que es el investigador principal del Laboratorio de Ingeniería del ARN del Centro Preston A. Wells Jr. de Terapia de Tumores Cerebrales de la UF, trabaja en el desarrollo de esta vacuna, así como de otras inmunoterapias, con las que se intenta "educar" al sistema inmunológico para que reconozca que está ante un tumor es extraño.
La tecnología de ARNm, similar a la que se empleó para desarrollar las vacunas contra la covid-19, utiliza a las células tumorales del propio paciente para crear una vacuna personalizada que potencie el sistema inmune frente al cáncer.
En el estudio clínico, se extrajo ARN del tumor extirpado quirúrgicamente en los cuatro pacientes y, a continuación, se amplificó el ARNm y se preparó mediante un vector de alta tecnología basado en nanopartículas lipídicas biocompatibles, para que las células tumorales "parecieran" un virus peligroso al reinyectarse en el torrente sanguíneo y provocar una respuesta del sistema inmunitario. La vacuna se personalizó para cada paciente con el objetivo de aprovechar al máximo su sistema inmunitario único.
"La demostración de que la fabricación de una vacuna de ARNm contra el cáncer genera respuestas similares y fuertes en ratones, perros que han desarrollado cáncer espontáneamente y humanos con cáncer cerebral es un hallazgo realmente importante, porque a menudo no sabemos si los estudios preclínicos en animales se traducirán en respuestas similares en los pacientes", asegura el coautor de la investigación Duane Mitchell, director del Instituto de Ciencia Clínica y Traslacional de la UF y del Programa de Inmunoterapia contra Tumores Cerebrales de la UF.