Comienza la batalla por la amenazada superviviencia del Gobierno de Francia
Durante una rueda de prensa de dos horas cortas de duración, Bayrou intentó «contentar» a casi todo el abanico político nacional, del presidente Macron a la extrema derecha de Marine Le Pen, la fuerza mayoritaria en la Asamblea Nacional, la única que puede salvar al presidente y el gobierno de una censura parlamentaria a repetición.
Sindicatos, izquierdistas y ecologistas han convocado una gran jornada de protesta nacional, el próximo día 10 de septiembre, con la «ambición» de paralizar Francia «indefinidamente». A juicio de Bayrou, esa jornada es un riesgos de «caos nacional», y propone «desactivar» esa amenaza grave convocando una sesión extraordinaria de la Asamblea Nacional (AN) para intentar conseguir la aprobación de sus proyectos.
Ante esos desafíos y amenazas, sin precedentes en la historia de la V República, fundada entre 1958 y 1962, Bayrou comenzó su rueda de prensa con una larga y sombría exposición de los peligros nacionales e internacionales que amenazan el futuro de Francia y el futuro de Europa:
- «Europa está dividida y es impotente ante el comportamiento rapaz de los imperios». Alusión a los EE. UU., China, Rusia.
- «Ante esa situación, inquietante, Francia está en peligro grave, víctima de su endeudamiento. Desde hace más de veinte años, cada hora que pasa la deuda del Estado aumenta en 12 millones de euros. Esa deuda es hoy la primera carga de los presupuestos del Estado. El pago de los intereses de la deuda es más importante que los presupuestos de Educación y Defensa».
Esa tragedia nacional es bien conocida. Comenzó con François Mitterrand (1981 - 1985) y continuó con Jacques Chirac (1995-2007), Nicolas Sarkozy (2007-2012), François Hollande (2012-2017) y Emmanuel Macron (elegido por vez primera por vez primera el 2017), Bayrou propone decisiones relativamente modestas, que son rechazadas por todo el abanico político nacional.
El primer ministro propone reducir en 44.000 millones de euros los presupuestos del Estado del año que viene. Proyecto rechazado por una inmensa mayoría de las fuerzas políticas parlamentarias. La tarde del lunes, Bayrou arremetió con mucha energía contra sus principales detractores.
Ante la gran jornada de lucha y manifestaciones del próximo día 10, convocada por sindicatos, ecologistas y La Francia Insumisa (LFI, extrema izquierda), Bayrou arremete con energía: «Por ese camino, Francia se dirigía al caos y la ruina».
Ante el PS, dividido sobre el proyecto de censura o no censura del gobierno, Bayrou está dispuesto a «negociar». Varios dirigentes socialistas han repetido que los presupuestos de Bayrou son «infumables» y dudan entre votar o no votar la censura que reclama la extrema izquierda.
Ante el resto de las fuerzas políticas, Los Republicanos (derecha tradicional), varios grupúsculos centristas y Agrupación Nacional (AN, extrema derecha), Bayrou ha convocado una reunión extraordinaria de la Asamblea Nacional, el próximo día 28. El gobierno presentará sus presupuestos y los diputados deberán votar o rechazar ese proyecto. Dudas y riesgos muy graves, para Francia y Europa.
A juicio de Bayrou, Francia «está al borde del caos y la crisis sin precedentes del endeudamiento, en una geografía mundial inquietante». Ante esos riesgos, sin precedentes, el primer ministro espera que la sesión parla