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La semana arrancaba con Carlos Sobera dando la bienvenida en el restaurante de 'First Dates' a dos nuevos comensales que buscaban una nueva oportunidad en el amor. Así, Pilar y Luis Miguel se presentaron en el programa de Cuatro para encontrar a su media naranja y el espacio televisivo los unió en un encuentro que comenzó con las mejores sensaciones. Y es que, Luis Miguel, un 'heavy' hasta la médula, congeniaba desde el primer momento con Pilar, que se definía como «rockera de corazón». «Voy a morir con las botas puestas», afirmaba la soltera durante su presentación.
El soltero salió encantado con la primera impresión que le dio la mujer. «Pibonazo», decía Luis Miguel de Pilar, con la que comenzaba la velada que daba inicio marcada por sus gustos musicales, pero que avanzaba con los dos comensales hablando de su vida privada, siendo los hijos o los negocios algunos de los asuntos sobre los que los dos solteros de 'First Dates' charlaron para conocerse mejor.
Entonces, Pilar decidió que era hora de subir la temperatura en el restaurante de 'First Dates' y para ello puso el foco en las relaciones sexuales, un tema del que Luis Miguel sacó pecho al comentarle que podía estar cada ocho horas manteniendo sexo. La soltera dudó de las capacidades sexuales de su cita y sin dudarlo le paró los pies. «No sé yo si tendrás tanta potencia. No te tires faroles», le espetó la mujer ante las cámaras del espacio de Cuatro que decía 'hasta aquí' la 'fantasmada' que se había tirado su pareja de la noche. «Tengo 46 años. A mí la moto no me la vendes tan fácil. No sé yo si Luis Miguel aguantaría mi ritmo sexual, porque lo veo muy tranquilo», señalaba Pilar que, no obstante, dejaba un pequeño margen a la sorpresa a su cita: «Aunque a lo mejor me equivoco muy gratamente».