Sevilla ya es la segunda ciudad de España con más rapidez en la concesión de licencias urbanísticas
El Ayuntamiento se convierte así en el primero de Andalucía que ajusta su normativa urbanística de licencias al nuevo marco legislativo y se equipara a lo que ya hacen otras ciudades de España como Madrid. Una iniciativa pionera que se suma a otros avances alcanzados en estos casi dos años de mandato, como la regulación de las viviendas de uso turístico. Sobre el terreno, supone una reducción al máximo legal permitido de la concesión de licencias, fijándose un tope de tres meses. Un avance, que acaba con uno de los lastres más importantes que tenía la Gerencia, y que se consigue gracias a que a partir de ahora sólo será necesario presentar el informe jurídico y la propuesta al Consejo para obtener este tipo de autorizaciones, puesto que el informe técnico se podrá aportar con el proyecto.
En líneas generales, la adaptación de la OROA introduce criterios de mayor eficacia, simplificación administrativa y eliminación de trabas. Para llegar al objetivo, se incorporan mejoras como la potenciación de la declaración responsable, eliminando el trámite de la licencia de apertura y facilitando que los nuevos establecimientos se puedan poner en marcha con inmediatez. De hecho, se amplía la relación de actividades y de obras que se puede acoger a esta declaración. Fuentes de Urbanismo han confirmado a ABC que este paso al frente administrativo no va a suponer una concesión «descontrolada» de licencias, pues se regula también el régimen de control posterior en el ejercicio de las actividades, además de garantizar la salvaguarda de la seguridad jurídica. En casos como el del Conjunto Histórico seguirá siendo necesario presentar el informe técnico ante la situación de especial singularidad.
La otra gran novedad de la ordenanza se basa en el impulso de la Ventanilla Única, ese mecanismo que unifica los procedimientos para insistir en la agilización de plazos. Hasta ahora, realizar una hoja de tramitación consumía un plazo de unos tres meses, a los que había que sumar también los ocho meses del informe técnico y un mes más para la resolución definitiva. Un calendario que ahora se disminuye en tiempo de forma considerable. Además, será clave la participación en el proceso de los colegios profesionales, que tendrán un papel específico, previo convenio, encomienda o contrato, en el esclarecimiento y regulación de cualquier tipo de procedimiento. Una apuesta que evidencia el interés del gobierno local por fomentar la colaboración público-privada, de modo que se beneficie a comercios, particulares y promotoras. Para ellos, se clarifican los criterios de clausura, suspensión y precinto de las actividades, especialmente en hostelería.
El control urbanístico
Las mismas fuentes de la Gerencia aseguran que la agilización de las licencias a través de la actualización de la OROA no va a suponer ni una privatización de las autorizaciones ni tampoco que se pierda el control urbanístico de las mismas. Más bien, todo lo contrario. Pues lo que se pretende alcanzar es que la administración se convierta en un instrumento más ágil y útil para los ciudadanos y, paralelamente, para todos los inversores que eligen a Sevilla en su cartera de proyectos. Así, y en relación a ambas críticas manifestadas por los grupos de la izquierda (PSOE y Con Podemos-IU) en la tramitación del cambio de la ordenanza, en Urbanismo aseguran que van a seguir manteniendo el control absoluto de las licencias, puesto que será la Gerencia las que las siga concediendo, aunque cambie el protocolo.
Con todo, los interesados tendrán a partir de ahora tres vías para solicitar las licencias urbanísticas que necesiten. Por un lado, el procedimiento con participación tanto de los Colegios Profesionales como de las Entidades Urbanísticas Certificadoras a instancia de un promotor o particular y, por otro, en los casos en los que sea a petición de la Gerencia a través de un convenio, encomienda o contrato. Sin embargo, aclaran que no se trata de un procedimiento obligatorio y que aquellos ciudadanos que lo deseen podrán seguir gestionando su licencia por el método tradicional. Es decir, replicando el mismo procedimiento que se venía llevando a cabo hasta ahora. Consideran en Urbanismo que estos casos también se verán beneficiados por la agilización de los plazos, ya que la carga de trabajo será menos en el servicio y, por tanto, se podrá dar una respuesta más rápida.