«Reclamamos el traslado y que aquellas personas que fueron responsables de decidir dónde iba cada uno de los servicios del Hospital, que no se sabe por qué casi ninguno está donde tiene que ir, dé la cara y se responsabilice de por qué tomó esa decisión y de lo que está pasando ahora», ha exigido la delegada de Prevención del HUT, Inés Pedreño.
La delegada ha asegurado que «se está ignorando a los sanitarios» y de que «a nadie le importan los trabajadores», al tiempo que ha preguntado al consejero de Sanidad que «cuánto vale la vida de nuestros sanitarios». «Por favor, tómenselo en serio, llévenlos fuera de aquí».
Cuando trabajar en el hospital de Toledo se convierte en problema de salud: «Llevo 11 sangrados nasales en un año»
El 27 de noviembre de 2024 varios trabajadores de laboratorios del hospital de Toledo sufrieron las primeras intoxicaciones. Doce meses después, los síntomas persisten, y lo que es peor, no hay explicación concluyente ni medidas efectivas para estos profesionales
En este sentido, ha señalado que esto también perjudica a la población, porque las pruebas están tardando mucho en salir. «Señor consejero, ¿qué retraso llevamos en el cribado de cáncer de Cérvix? ¿Cuánto tiempo en el resto de los cribados? Tómenselo en serio, es su población. Usted es el responsable de que esto no se solucione».
«¿Cómo que todo esta bien?»
Los sanitarios aseguran estar «hartos y cansados» de decir que «el medir no es proteger» porque los sanitarios siguen enfermándose, y han criticado que la consejera portavoz del Gobierno de Castilla-La Mancha, Esther Padilla, dijera este miércoles que «todo está bien» en el Hospital.
«¿Cómo que todo está bien? Los compañeros siguen con erupciones en los ojos, con sangrados nasales, con erupciones cutáneas, con disminución del nivel de conciencia. En esa planta hay algo que son incapaces de solucionar y de diagnosticar. Estamos cansados», ha aseverado.
De hecho, la concentración de este jueves ha estado representada con un sarcófago y muchas velas, ejemplificando «la muerte del servicio». «No es una muerte física, pero sí a cachitos. En la población no sabemos qué consecuencias va a tener esto a largo plazo, pero igual luego, como en todos los sitios, nos tiramos de los pelos y nos arrepentimos de no haber hecho nada. Ya vamos un año tarde», ha explicado.
Pedreño cree que todo indica a que el problema se debe al sumidero, que no han levantado ni han revisado el circuito de eliminación de aguas y aguas residuales. «Es cuestión de dinero y de tener voluntad de solucionar las cosas, cosa que a día de hoy no estamos viendo».
La delegada de Prevención del Hospital Universitario de Toledo ha afirmado que seguirán manteniendo las concentraciones todos los lunes hasta que la situación se solucione.