Las medidas son preventivas y se producen tras el aumento del nivel de riesgo en las últimas semanas, según el Ministerio, que cita el creciente número de infecciones entre aves silvestres y domésticas en el norte y el centro de Europa.
Las nuevas normas prohíben la cría de aves de corral al aire libre, compartir fuentes de agua con aves silvestres y el uso de patos y gansos junto con otras especies.
La medida sigue a órdenes de confinamiento similares en Irlanda, Francia y Gran Bretaña en las últimas semanas, a medida que aumentan los casos con el regreso de las aves migratorias a Europa para pasar el invierno.
Brotes en numerosas comunidades
Durante las últimas semanas, se han detectado a lo largo de todo el país diversos casos de gripe aviar. La Comunidad de Madrid, Aragón, Castilla-La Mancha o Castilla y León han sido algunos de los territorios que más se han visto afectados.
En la localidad de Olmedo (Valladolid), un brote en una granja de gallinas obligó a sacrificar a más de 300.000 aves.