Комментарии 0
...комментариев пока нет
China lanza un rescate inmobiliario de 38.000 millones para adquirir viviendas sin vender>
El subgobernador del Banco Popular de China, Tao Ling, explicó este viernes en rueda de prensa que mediante este nuevo mecanismo de préstamos pretende alentar a las instituciones financieras en apoyo de la compra por empresas públicas de viviendas terminadas y no vendidas a precios razonables para destinarlas a la adjudicación o arrendamiento como viviendas asequibles, lo que se espera que genere préstamos bancarios por valor de 500.000 millones de yuanes (63.680 millones de euros).
El programa está abierto a 21 bancos nacionales, incluyendo el Banco de Desarrollo de China, establece un tipo de interés del 1,75% en créditos a un año con la posibilidad de extenderse cuatro veces, mientras que el Banco Popular de China emitirá nuevos préstamos basados en el 60% del principal, lo que puede impulsar los préstamos bancarios hasta el medio billón de yuanes.
Nuevo modelo inmobiliario
«Esta política es una medida importante introducida por el Banco Popular de China para apoyar la construcción de un nuevo modelo de desarrollo inmobiliario y conduce al logro de múltiples objetivos a través de un enfoque orientado al mercado», defendió el funcionario. También destacó que el objetivo final de la medida no es otro eque el de «acelerar la liquidación de existencias de viviendas existentes» al tiempo que se impulsa la oferta de vivienda asequible, ya sea para la venta o el alquiler.
Por otro lado, el Banco Popular de China anunció la rebaja al 15% desde el 20% anterior del porcentaje mínimo a desembolsar como entrada para los compradores de primera vivienda mediante préstamos hipotecarios, mientras que para la adquisición de segunda residencia el umbral se situará en el 25% desde el anterior 30%.
China trata así de hacer frente a la grave crisis inmobiliaria que vive el país y que se ha convertido en el primer obstáculo económico para la segunda economía del mundo. En los primeros cuatro meses del año, las compraventas de vivienda se han desplomado cerca de un 50% y los precios siguen en caída.