Un portal inmobiliario anuncia la venta de viviendas okupadas en Sevilla

En total, se ofertan 125 viviendas por toda la capital hispalense. Se concentran sobre todo en Torreblanca, La Plata y Los Pajaritos; no obstante, se extienden por toda la ciudad. Por ejemplo, en la calle San Vicente, un piso catalogado como ocupado de 167 metros cuadrados se vende por 520.000 euros. En la Macarena los pisos de 3 y 4 habitaciones en este estado rondan los 220.000 euros.

En las descripciones de la mayoría de ellos se indica que están «ocupados por una persona sin justo título» o directamente se usa el término «okupados». La ocupación se expone como la razón por la que «no se pueden realizar visitas« y por la que el interesado está ante una »oportunidad sólo para inversores o vecinos que conozcan el inmueble«.

De hecho, en la propia página web uno de los filtros que aparece para definir la búsqueda en función de la situación de la vivienda, entre las que se encuentran 'disponible' o 'alquilada con inquilinos,' es el de 'ocupada ilegalmente'.

En una vivienda de 89 metros cuadrados y cuatro habitaciones que se vende por 47.000 euros en La Oliva, se especifica que «su situación se refleja en su precio altamente competitivo», considerándolo «una gran oportunidad para quienes buscan una inversión a largo plazo». También en el propio barrio del Polígono Sur, en el anuncio de un piso de 88 metros y tres habitaciones, que se vende a 51.000 euros, se enumeran unas condiciones especiales además de las citadas anteriormente. Estas son: no se permite hipoteca al no tener acceso para tasar; la venta es sin posesión al estar ocupado; no se dispone de fotografías interiores y que la obtención de las llaves dependerá del curso del procedimiento o de la posible negociación con los ocupantes. No obstante el promotor inmobiliario no cobra comisión al comprador, quien además también puede solicitar asistencia jurídica.

En la descripción de un adosado en Torreblanca por 51.000 euros -108 metros cuadrados, tres habitaciones- se especifica que no se puede hipotecar la vivienda, sólo admitiendo pagos al contado; un requisito que se repite en otros anuncios.