En este contexto, Granada se consolida como un punto de referencia al abrir una ventana a esta nueva revolución tecnológica. La Agencia Digital de Andalucía (ADA) lidera el Centro de Innovación de Tecnologías Exponenciales, con IBM como principal socio tecnológico y la colaboración de Ayesa, empresa andaluza de integración tecnológica con sede en Sevilla. «Este centro nace con el objetivo de posicionar a Andalucía como un referente europeo en innovación y soberanía digital», subraya Raúl Jiménez, director general de la ADA.
Contribución al desarrollo económico
La incorporación de la Agencia a la IBM Quantum Network permitirá a universidades, empresas, administraciones públicas y centros de investigación poner en marcha iniciativas con impacto real en la economía y la sociedad. Según Mikel Díez, director de IBM Quantum para España y Portugal, «el objetivo es acelerar la adopción de estas tecnologías exponenciales para situar no solo a Granada, sino a toda Andalucía, como referente en su aplicación y que esto contribuya al desarrollo económico de la región».
Granada refuerza su posición como polo tecnológico europeo en inteligencia artificial
Díez explica que IBM trabaja en la adopción de tecnologías con un enfoque práctico: «Se llaman exponenciales porque su valor crece con el tiempo. Cuando se combinan —por ejemplo, inteligencia artificial y computación cuántica— el resultado no es uno más uno, sino un efecto multiplicador».
El proyecto andaluz se articula en torno a tres grandes ejes: el impulso a la formación y la investigación en tecnologías cuánticas; el fortalecimiento del ecosistema innovador regional; y la creación de una nueva industria basada en los servicios cuánticos. Para ello, se desarrollarán pilotos y casos de uso híbridos que combinen inteligencia artificial y computación cuántica, aprovechando los recursos de computación de alto rendimiento (HPC) del sistema Hércules y el hardware cuántico real de IBM. Además, se pondrán en marcha programas de formación y divulgación para promover la especialización y la transferencia de conocimiento.
Colaboración público-privada
Granada refuerza así su posición como polo tecnológico europeo en inteligencia artificial. La colaboración público-privada entre administraciones, universidades y empresas está tejiendo una red que generará empleo de alta cualificación, diversificará la economía y consolidará un nuevo modelo productivo basado en la innovación. El nuevo centro se ubicará en el Centro de Inteligencia Artificial de Andalucía, en el edificio del Cortijo del Parque Tecnológico de la Salud, sede también del consorcio Fernández de los Ríos y de la UGR-AI. En este entorno académico y científico, IBM ve un terreno idóneo para el desarrollo del talento. «Granada cuenta con una universidad de enorme fortaleza investigadora. La estrategia de la Junta está muy alineada con nuestro modelo: crear pequeños clústeres donde centros académicos, empresas e investigadores trabajen juntos. La idea es atraer estudiantes, doctorandos y científicos para que participen en proyectos concretos», explica Díez.
Con la red pública más extensa de ordenadores cuánticos operativos en la nube, IBM aporta su experiencia. La ADA, como miembro de la IBM Quantum Network, tendrá acceso en la nube a ordenadores cuánticos en Europa y Estados Unidos, con el fin de diseñar algoritmos híbridos que combinen mecánica cuántica e inteligencia artificial.
Es una nueva forma de procesar información. «La computación clásica tiene límites: no puede manejar infinitas variables. La cuántica, en cambio, aprovecha las propiedades subatómicas para analizar todas las combinaciones posibles en una sola lectura. Esto nos permite abordar problemas que antes eran inabordables», explica el responsable de IBM. Entre los ejemplos que menciona: «El desarrollo de nuevos fármacos, la optimización de inversiones financieras o incluso la fabricación de fertilizantes más sostenibles... Con la cuántica podríamos reducir ese impacto energético».
La integración en la red de IBM se apoya en cuatro pilares: «capacidad tecnológica, ecosistema de investigación, talento y tejido industrial». Estos factores se dan en Granada. «Buscamos es activar el ecosistema: que universidades y empresas colaboren en proyectos concretos, que centros tecnológicos y administraciones trabajen juntos para mejorar la gestión del agua o los procesos asistenciales», concluye Díez.