El resultado es tan surrealista como entrañable: Homer Simpson ejerciendo de guía turístico en la plaza de Zocodover, paraguas en alto, como mandan los cánones de los free tours, mientras explica las bondades de la ciudad.
La ruta continúa por la Puerta de Bisagra, donde el quiosco y la churrería de Catalino se cuelan en esta particular versión animada, demostrando que hay tradiciones que ni siquiera Springfield puede mejorar. Tampoco falta el guiño al esfuerzo físico que supone recorrer el Casco Histórico: Lisa y Bart aparecen en la Puerta del Sol agotados por las interminables subidas y bajadas que todo visitante, y buen toledano, conoce de sobra.
El vídeo no se olvida de otros templos locales. El bar Ludeña, el obrador de Santo Tomé, con su irresistible escaparate, o la estación de tren, símbolo de llegadas y despedidas, aparecen reinterpretados con el inconfundible estilo de Matt Groening.
Incluso la estación de autobuses y los habituales atascos de la TO-23 tienen su momento de gloria, porque si algo caracteriza a Los Simpson es su capacidad para retratar la vida cotidiana, incluso en Toledo.
Esta simpática iniciativa, que ya suma miles de visualizaciones y comentarios, demuestra que la ciudad también sabe reírse de sí misma y conectar con nuevas generaciones a través de la cultura pop. Una mezcla entre patrimonio, humor y redes sociales que convierte a Toledo, aunque sea por unos segundos, en la Springfield más monumental del mundo.