Las cifras oficiales del Ministerio de Economía, Comercio y Empresa indican que las exportaciones desde Córdoba a Estados Unidos de aceite de oliva en los ocho primeros meses de este año (últimos datos disponibles) se redujeron un 9 por ciento en relación al mismo periodo de 2024. En total se comercializó mercancía por un valor de 122,83 millones de euros. Hasta abril la evolución de este apartado fue positiva para la industria aceitera cordobesa con un crecimiento interanual del 17 por ciento, pero todo cambió a partir de ese momento.
Hay que recordar que fue en abril cuando Donald Trump lanzó su primera amenaza de imponer un arancel del 20 por ciento a Europa, un anuncio que quedó suspendido a expensas de unas negociaciones que se abrieron con la Unión Europea (UE) y que concluyeron en julio con un acuerdo por el que Estados Unidos implantaría una tasa del 30 por ciento a los productos llegados a su país desde el Viejo Continente a partir del 1 de agosto. Los expertos consultados por ABC señalan que esa incertidumbre provocó que muchas operaciones se agilizaran para esquivar esos posibles recargos.
A pesar de esta bajada de las ventas, los representantes del sector no tienen esa percepción de haber perdido cuota de mercado en el país de las barras y las estrellas, aunque temen lo que puedan pasar en el futuro más inmediato.
El presidente de Cooperativas Agroalimentarias en Córdoba, Rafael Sánchez de Puerta, indicó que «no creo que los aranceles hayan restado, por ahora, volumen de ventas, aunque entiendo que, lógicamente, al final se notará». No parece probable corto plazo, pero el también director general de Dcoop espera que estos recargos impuestos por Donald Trump desaparezcan en algún momento. «Lo que más nos gustaría es que volviera a imperar el sentido común y que esta situación terminase pronto», señaló.
Almazaras industriales
La gerente de la Asociación Cordobesa de Almazaras Industriales (Acora), Macarena Sánchez, mantiene una opinión similar a la de Sánchez de Puerta, en relación a este asunto. «No tenemos constancia de que se hayan reducido las exportaciones a Estados Unidos, pero no sabemos en un futuro próximo si los aranceles sufrirán un aumento, por lo que iremos analizando el mercado en función de las decisiones del Gobierno de Trump«, subrayó.
A pesar de todo ello, las ventas globales al exterior de aceite de oliva se mantienen al alza. Las estadísticas del departamento encabezado por Carlos Cuerpo apuntan que entre enero y agosto se llevaron a cabo unas transacciones totales por una cuantía monetaria de 541,3 millones de euros. Son 16 millones más que en el ejercicio anterior, lo que supone un ascenso de algo más del 3 por ciento.
Italia, principal socio comercial de la industria oleícola cordobesa, fue el principal sostén de esa subida al anotarse en ese periodo un aumento de las compras de zumo de aceituna superior al 30 por ciento, hasta situarse en los 217,6 millones de euros. En cambio, el tercer comprador de aceite de oliva de la provincia (Portugal), al igual que Estados Unidos, experimentó, una caída de operaciones del 35,4 por ciento.