«Lo que tradicionalmente estaba pensado como una oferta puntual dirigida a adelantar compras navideñas y productos de tecnología con el Cyber Monday, se ha extendido al sector turístico y prácticamente todos los componentes de su cadena de valor llevan ya varios días con las campañas de promociones comerciales en vigor», han puesto de relieve.
Los descuentos más habituales se sitúan en una franja del 20-25% sobre tarifa, aunque hay algunos programas de fidelidad que pueden incrementar este descuento hasta el 35-40%, además, no sólo al alojamiento, en ciertos establecimientos lo hacen extensivo a todos sus servicios (spa, restaurante), si bien en un porcentaje más bajo, del 10% sobre la tarifa ordinaria.
De forma análoga, compañías de transporte, aerolíneas y mucha oferta de ocio complementario, se apunta igualmente a las promociones para ese «viaje soñado», apostillan desde la asociación presidida por Fede Fuster.
«Dicen que las vacaciones las empiezas a disfrutar ya desde la reserva, pensando en cómo lo vas a pasar», razona Javier García, vicepresidente de Magic Hotel Group, de Benidorm, quien corrobora esta tendencia del Black Friday como motor de ventas, en su caso, ha duplicado este año.
«Cuanto antes compras, más baratos encuentras los precios, la antelación es una ventaja», subraya este directivo que, además, encuentra en esta dinámica un alivio para su gestión interna. «A nosotros nos permite contratar el personal que vamos a necesitar, programarlo todo, también las compras a proveedores», señala.
Nada que ver con otra moda que les ocasiones quebraderos de cabeza: «Quienes se esperan para encontrar rebajas de última hora». En ese caso, les resulta en los hoteles imposible planificar y sufren la incertidumbre.