Harry Maguire confirma el calvario del Liverpool

Los de Amorim encontraron la dicha apenas en el minuto dos. Mejor no preguntar: Mac Allister quedó tendido en el suelo por una colisión con Van Dijk, Diallo retuvo y luego Mbeumo batió a Mamardashvili con pierna derecha. De repente, o por un instante, el United pareció un equipo serio.

La primera parte se sucedió de una portería a otra, ambas vertiginosamente próximas, como si no existiese campo entre medias.

Sí, Kundera dice que la proximidad puede producir vértigo. Fijémonos en Cody Gakpo. Gakpo se encontró dos veces con el palo en la primera mitad. Gakpo generaba muchísimo peligro cada vez que cogía el balón. Gakpo volvió a encontrarse con el palo en la segunda mitad. Gakpo marcó el gol del empate en el 78'. Gakpo estaba siendo el mejor de su equipo. Lo fue. Gakpo falló un gol cantado de cabeza cerca del 90. Gakpo acabó triste.

Cuando el polo norte se aproxima al polo sur hasta llegar a tocarlo, la tierra desaparece y el hombre se encuentra en un vacío que hace que la cabeza le dé vueltas y se sienta atraído por la caída.

Justo antes del susodicho fallo, Bruno centró bombeado al segundo palo y Maguire machacó a Mamardashvili de un testarazo. El Liverpool, líder intratable de Europa hace apenas un mes, suma ahora su cuarta derrota seguida. Los polos. Ajá.